El Proceso

Muchas veces, cuestionarás tu existencia, el por qué te dedicas a lo que te dedicas... te sentiras insatisfecho aunque estés haciendo algo que te gusta mucho. Tu alma comienza a sentirse incómoda y es cuando te va indicando que hay que moverse.

Empiezan los sueños extraños, te dan ganas de meditar, cuidar de tu cuerpo y esto es porque empiezas a darte cuenta de que tu cuerpo es un vehículo, es el cascarón que mantiene a tu alma en este plano. Si tienes alguna adicción, buscas ayuda o tienes algún accidente que te hace caer en cuenta de que necesitas tomar otro rumbo. La gente se empieza a alejar, te sientes la "Phoebe" de tu círculo social (si no viste "Friends" no vas a comprender mucho, pero es ser el "raro"), sientes que nadie te apoya o que nadie te comprende. Y esto se debe a que dejarás de vivir desde el victimismo y tomarás responsabilidad de todo lo que has creado en tu vida... porque sí, tú eres el centro de tu universo y creas tu vida basada en creencias y elecciones inconscientes.

Literalmente, te harás consciente de que todo tiene que ver contigo y nada que ver con el otro. Habrá situaciones que te muestren cosas de tu pasado que no te gustaban y tendrás que hacerlas conscientes para poder avanzar.

No, no será sencillo y es por eso que me gusta acompañar a la gente en este proceso, porque sé lo que cuesta.

Yo no quería darme cuenta de que tenía un problema con el alcohol; que mi vida la estaba llevando al límite, hasta que un día, choqué (bueno, la verdad es que, choqué dos veces, pero la segunda vez fue la peor), ese "accidente" fue dos días antes de que yo cumpliera 39 y literal, casi me llevan detenida. Afortunadamente, no atropellé a nadie, no me morí y haciendo retrospectiva, me rodearon de ángeles que me estuvieron ayudando y no me dejaron en ningún momento.

No podía seguir viviendo así.

Sí, claro que me quedé sin carro, estuve enojada conmigo y con el mundo algunos meses después de eso. Me daba vergüenza admitir que había chocado alcoholizada. De hecho, le dije a mi mamá hasta que ya no podía ocultarlo. Me quemé las manos y casi no podía valerme por mí misma... nunca había valorado tanto mis manos.

A lo que voy con todo esto es que, no es un proceso fácil. Vas a querer regresar a los hábitos autodestructivos, juntándote con gente que no te va a sumar, que para el relajo están, pero para los verdaderos problemas, no van a estar y sabrás que tienes que dejarlos fuera de tu vida. No porque sean "mala influencia", sino porque tú mismo te llevarás a la muerte.

Volvemos al: "Tú eres el centro de tu universo." Así que, la "mala influencia" para ti. eres tú mismo.